El reciente 8 de diciembre, se conmemoró el día de la Inmaculada concepción de María. Este día pertenece a una arraigada creencia del catolicismo, que sustentándose en la fe, sostiene que María, madre de Jesús, diferenciándose del resto de los seres humanos, no concibió a su hijo a partir del pecado original. La purísima inmaculada concepción de María, alrededor del mundo y a través de sus fieles católicos. Es una tradición de arraigo cultural, que mueve a centenares de personas en importantes ciudades. En la capital de Chile, días antes de la llegada del día mencionado, los creyentes realizan peregrinajes al santuario de los Vásquez y el estado y la seguridad pública, disponen de todas las medidas para que dicho evento se lleve a cabo con éxito.
-Lucas, 1, 28: El ángel Gabriel no se dirige a María por su nombre, sino designándola con la palabra griega kecharitoméne, que traducimos “llena de gracia”
-Apocalipsis, 12, 5: “Una señal apareció en el cielo: una mujer vestida de sol y la luna bajo sus pies” (tanto esa cita como la anterior explican que en muchas representaciones de María aparezca una luna y una serpiente a sus pies)
Datos interesantes:
La Iglesia Católica considera que la concepción de María tuvo lugar el 8 de diciembre, nueve meses antes de la festividad del nacimiento de la Virgen, el 8 de septiembre.
Tradicionalmente se celebró este día la fiesta. Posteriormente tomó sentido la celebración el 8 de diciembre al ser este día de 1854 la proclamación del dogma por parte del Papa.